29.1.10
A ti te estoy hablando a ti, a ti la que no escucha. A ti que con lo que te sobra me darías la luz para encender los días. A ti que juegas a ganarme cuando sabes bien que lo he perdido todo. A ti te estoy hablando a ti aunque te importe poco, lo que estoy diciendo. A ti te estoy hablando a ti aunque es perder el tiempo. A ti que te paso tan lejos el rigor del llanto y la melancolía. Si nunca dije la verdad fue porque la verdad siempre fue una mentira. A ti te estoy hablando a ti aunque te valga madre lo que estoy diciendo. A ti que te falto el valor para pelear por ti. A ti que te consuelas con cubrirte de Channel las huellas de mis besos. A ti ya no te queda nada. A ti ya no te queda nada, nada. A ti que por despecho estas pensando con los pies. A ti que me dejaste solo incluso cuando estabas en mi compañía. A ti ya no te queda nada. A ti ya no te queda nada, nada. A ti te estoy hablando a ti tan sorda y resignada. A ti que duermes con tu orgullo y te dejas tocar con tu rencor barato. A ti que te gusta ir de mártir repartiendo culpas que son solo tuyas. A ti te estoy hablando a ti porque no hay nadie más que entienda lo que digo. A ti ya no te queda nada, y a mi me queda por lo menos, este síndrome incurable de quererte tanto.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario